El encanto de los hombres callados

Siempre hubo rostros serios de hombres, desde chiquitito contemplé caras que no emitían sonidos, sólo la mirada y los gestos, sobre todo hombres. Y se fueron quedando en la memoria pegados, con su misterio. Me crucé cientos, miles de veces, con hombres que trabajaban concentrados o ausentes y con esa

Leer más